El giro de la rueda, hace que esta fecha dos años atrás fuera domingo y hoy un martes. Pero en tal caso un día igual a cualquiera si no añadimos a el un significado. He aprendido que el mejor significado es aquel que simplemente conforta tu vida. Es decir, no hay un acontecimiento que pese. No hay pesar. Que el verde de las hojas siga verde. Que las manos sigan jugando con el barro. Que la luz cobije el día como madre. Porque todo significado externo en la memoria que no diga que ha sido un bello día, deja tajos dolientes que siempre se vuelven excusas. Porque al fin y al cabo todo aquello que caga la soberbia, se vuelve historia, se vuelve discurso, se vuelve memoria. Por eso me pregunto: ¿A quien sirven las fechas si el sol aun brilla en lo alto?
A