Podría decir muchas cosas, como por ejemplo que me importa la lucha del feminismo combativo o que me preocupa seriamente lo que dicen en una reunión social donde solo queres bostezar o salir a fumar afuera para no oír mas boludeces, pero finjo que me importa como si de algo valiera que me importe, como si debieras mostrar sentimiento hacia lo que no sentís, o evitar confrontar fingiendo ser parte de un clan que detestas pero que te da cierta lastima herir mientras no crucen la raya.
Pero así es estar en sociedad, el ruido, los mas extrovertidos se vuelve tan molesto que les das la razón para dejar de oír lo mismo buscando refugio en la fuga de ese mundo de saltinbanquis molesto y cualquier excusa es buena para el bochinche sea su felicidad o sus ñañas. Un día al ver que ya no fingis ser del palo ladran mas que los perros de un barrio. Habitar entre los inflados exige toda la habilidad del lobo.
Eso si, cuando destrozan la zona libre y viva, entonces, ni tiempo de ladrido asoma a su garganta, el lobo conoce bien que el agua y el aceite no se unen al menos en estos tiempos.
Como en las sagas paranoicas que se cuentan en la actualidad, sos como de otra especie entre especies, y sin dar escusas aunque no queriendo llamar la atención, pero ahí esta, el pueblo del lobo, la gente jaguar, los guerreros leopardo, y muchos mas, sumidos en estos llanos por antepasados atraídos alguna ves por los remolinos entre los mundos.
Alex.
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