Milonga de ángel y diablo

 

Veo el ángel en la cúspide,

no se por que,

legisladores lo ha puesto,

no solo no lo se,

tampoco me importa,

esa vil metáfora.

¿Será que suena tompeta,

de un ángel en lo alto?

¿Será que lo que quieren todos,

es imponerse a todos?

El Tata sabe lo que hace,

y no creo en esas gnosis,

se que todas ellas son excusas,

excusas, pa seguir siendo diablos,

no digo no tener algo de eso,

digo es que es mejor,

sin excusas.

Verbo puede decir verdad,

en este juego de errores,

pero carajo que es jodido,

decir verdades sin sumirse,

porque aquí verdad,

no cuenta, se pide, se insta,

a que agachemos,

la cabeza.

Si se es sabio, se la liga por sabio,

si se es astuto, por astuto...

malaya que cosa bien puerca,

que se nos fuerce a aceptar razones,

pues ahí, aunque uno no lo quiera,

es donde se termina,

siendo un poco,

o bastante diablo.

a

Necesario

No me importa si el universo comienza,

o si al fin culmina,

sí del paso de las horas,

que lentas germinan,

como la huella del día,

incierta a cada viento.

La ansiedad que en mil maneras,

despoja simiente de un instante,

la firmeza tenaz que avanza,

e inclina a dos aguas la arboleda.

Sustentan los unos pensamiento,

y aquí los otros voluntades,

verbo vuelto aguas y caricias,

pensamientos son pesares.

Se despliega cada día,

se enrolla cual serpiente,

el sol de mañana,

estertor de madrugada,

y lanza en mano, a paso firme,

pueda ser sitiado,

y al fin tomar la torre,

que en toda vasta espera,

se hace siempre necesario.

a

Tristeza

 

Hoy quiero perderme como árbol entre niebla,

será por sentir ausencia, será por lucha incierta.

No sirve golpear paredes,

batir las alas, estar alegre,

solo andar perdido,

como un árbol verde.

Marcar aquí morada,

ajeno a todo,

a las luces,

o a los pétalos.

¿Quien grita victoria en la derrota?

tan solo persevera,

quien acepta destino,

o trama vil venganza,

bajo luz de candil,

frente a un vaso de vino.

Deambulo como dios de las afrentas,

por fríos ventanales,

de vidrios empapados,

buscando ver un rayo,

que al fin,

parta en dos,

esta tarde,

de sábado.

a

EL SUTRA DEL DESCARRIADO:

 

Si desde el engendro de los Eones no se ha torcido la voluntad de quien camina las neblinosas calles como sombra cazando la suerte. No se espere que la conclusión del sueño, ni el pralaya, ni la guerra de los dioses la pueda torcer.

Será que la voluntad replegada envuelta sobre si como una media no es la misma que la criatura que le da albergue y se escabulle del voraz asedio de la lluvia de huesos y despojos de otros tiempos.

Arqueología paradojal que descubre el futuro escarbando el pasado que es historia de un intento.

Así la nada se declara independiente poniendo en peligro la economía de todo el universo y El-los dioses se abalanzan entre los pliegues de la realidad entrando por las esquinas para devorar a tan osado mentecato pero el combate no se da como lucha colosal, sino con astucia y subterfugio, guerra de guerrilla, eternidad escondiéndose de si, ocultándose hasta el ultimo sueño, aunque para retenerlo deba soltarlo y quede la nada.

Pesadilla pa los dioses la noche del cazador de sueños.

Vera que en su conducta hasta la vieja Maat, no puede tomar un juicio pa quien camina en equilibrio hasta por donde no debe y en ese juego final, eludiendo todas las trampas se escurre entre la negrura de la nada haciéndose consigo la gema caída del Lucífugo para volver a jugar el juego eterno de acechar y cazar sus propios sueños.

(Así deambulan

quienes siguen

este sutra).

A (2013)

Amar

 

Dicen que imagen debe ocultar el deseo,

como si al buscarse piel,

imagen sea, como de pasto en el suelo.

Clamo aquí a potestad de cuatro vientos,

invoco Gran Espíritu sin menor quebranto,

como a la raja entre los mundos,

declararando mi deseo

y así lo elevo a cielo,

clavando firme esta lanza al suelo,

esgrimiendo tenaz en un susurro,

mi voluntad, mi intento.

Me has oído llegar tal como te visto venir,

no aúllo nena, no, aunque perros me ladren,

aunque pregunten si hay alguien,

amor, nos deja las huellas,

e inusitado se extiende.

He visto cielo desde tus pies, tras bragas y piel,

he visto tus candiles, como has visto tu los míos.

hay vida en lo lejano, hay carbones encendidos,

te digo que hoy es siempre, como lo es el fuego y el agua.

Sigiloso siempre ma acercare de algún lado,

afilado, potente, bruñido, mas allá carne y vida,

acechando lo mio, orinando el territorio,

y

sentiré tus caricias, sobre melena de lobo,

clamare a la hasta del búfalo,

pa que se hinque en los leones.

Escribí un día hace años, viendo a futuro,

que te rastrearia tal como en el sutra del descarriado,

acechando eones, acechando instantes,

alumbrando dentro,

para caer como rayo,

preñarte de infinito,

a ti, mi amada,

en tu hermoso vientre,

de amor,

de hembra

y

de madre.

a

Lo que vendra

 

Los tiempos de uvas y vendimia se han ido,

tras cada esquina se asoma lo incierto,

y aquí ante el poniente, frente a centinelas,

evoco a la vieja guardia que se va alzando.

Despacho las velas al árbol de sombras,

clamo los sueños ante hojas perennes,

la tierra y lo alto aceptan mi rito,

y tiemblan los álamos al horizonte,

mientras el todo se tiñe de rojo.

Oigo estallido de clamor en la sombra,

cuando golpea el rayo un árbol cercano,

alzan los guardianes, se elevan despacio,

mientras silenciosa la voz.

a nuevo ciclo viene, se acerca

y por fin, me habla.

a

Preferencias

 

Elegante antesala de la noche,

teñida de lumbre sobre moradas,

como jazmines de fuego,

en luces del lienzo,

de esa fiesta lejana,

del paso prohibido

al propio occidente.

No se ama con ojos vendados,

por eso dicen que el amor es raro,

cosa sagrada,

porque amar, se ama sabiendo,

tal como apresura,

guardar crepúsculo dentro,

quien sabe que un día,

cenit le hurte las noches.

Lo se bien, si,

tengo preferencia,

amo a quien saluda al sol,

aunque elija yo,

en secreto,

perderme viendo,

en el manto del cielo,

remolinos de estrellas,

como el pintor alucinado.

a

De nubes y fuego

 

Sobre oscuras nubes me he puesto a cultivar,

a tu manto del misterio ofrezco las semillas,

los sueños.

Corona bóveda de calle,

capitel hecho de lluvia,

la tuya, la mía,

la de todo día.

Muy lejos de hipótesis,

reposo en plumas de arte,

pues no hay día,

en que el sol o el agua,

no alimenten palabra viva,

o barran palabra vana.

Golpea duro el granizo

a emotivos de razones,

cerebro y genitales,

se debaten locamente.

Mas, lejos de memorias,

amor y sexo,

son,

incondicionales.

Es curioso como defienden,

el yo de su entraña,

quienes divinos se sienten.

Velas de hueso y plomo,

enciendo a ese gil gauchaje,

cuyo único sentido,

es expeler palabras,

sin ningun sentido,

sin menor milagro.

Pero en lo alto,

sí quiere,

el rocío de los cielos,

como el mismo,

de tu boca,

porta tal fuego,

que vuelve rojas las nubes,

y germina todo,

sueño.

a

Blues y añoranzas por las calles del frio

 

¿Puede la envidia,

detener un rayo?

Orlados de funestos encajes,

sacuden huesos y soberbia,

frente a infames altares.

¿Cuándo sonreirán en paz?

¿Puede el odio detener

al sol de la mañana?

Abrazo la pena de quienes sufren.

Oh viernes tortuoso y frío,

azul como un blues.

Hoy hay quienes lloran sus seres perdidos.

Hoy hay quienes duermen en la calle helada.

Hay quien dice que la vida es un infierno,

pero te digo que a infierno van,

quienes la volvieron tal.

Oigo Meta- versos de inclusiones,

mientras veo a excluidos,

duermiendo heladas calles de desamparo.

Ceremonias de pancartas y discursos,

graznido de cuervos.

Deambulo entre la lluvia

Compartiendo con la hermandad de la orfandad.

Ya no maldigo enemigos,

a todos bendigo, en eso a todos incluyo.

A la risa de la hermana hiena,

como la pureza de fría noche.

Sigo viendo belleza.

Pregunto:

¿Puede la envidia

detener la poesía?

Bendigo al sol de la mañana,

y al ave de la noche.

¿Puede la envídia,

detener al amor?

Pregunto:

¿Puede ver la vileza,

mas allá del funeral?

Las frías gotas empapan mi cara.

Mis pasos se agitan,

vuelvo a casa,

necesito hogar,

y

añoro

tu ojos,

mujer.

Oh si,

desde aquí,

la ciudad de la furia

te añoro.

a

Al Crepusculo

Oigo el estertor de humanidad errada,

mis ojos fijos a poesía y al amor,

pasos inciertos ante esta distancia.

Elevo mis ojos a crepúsculo,

que, vuelca cabellera,

así inmensa,

cubriendo desvelo,

la tuya,

abrigando piel,

hasta estrella de alba

Este color…

Tu sabes como añoro,

rizos y bucles de destino,

cuando cae toda noche.

Te amare siempre.

Aunque se incendie el horizonte,

aunque solo queden huellas en sal,

y

como árboles descubiertos,

suavemente se estremecen,

seguiré,

acariciando tu alma.

Así

de eternidad,

en eternidad.

a

Desde la Mañana

No soy culpable por preferir literatura,

más que matemática,

días de sol

bruma,

verdad,

y

amor.

Hay luz en cada esquina,

hay penas y olvidos

hay también esperanza.

Toda tu caricia habla más

que cualquier palabra,

fulmina,

destierra la sed.

En confluencia de tal,

sentido,

defenderé a quien amo,

habrá hierbabuena,

y

andaremos,

a contraviento,

sea al sol,

o

asomen,

tempestades.

a

Del Amor en Verdad

 

Levanto mis ojos y veo belleza,

aunque mal cable,

se cruce, por lo bello.

Siempre hay un diálogo en todo,

incluso en el silencio.

El orgullo a veces nos preserva,

y veces otras,

nos hunde.

Sumidos en necesidades,

olvidamos,

cuando lo uno,

cuando lo otro.

Yo veo un cielo tenaz sobre árbol en invierno.

Alguien ve sus retos y su verano.

¿Dónde quedan nuestras esencias en la puja de necesidades?

Al final todo es significado.

El no juicio es también juicio.

Creo que hay solo único refugio,

aun

a pesar,

de necesidades,

y es,

anidar esencia,

debajo de mismo cielo,

y

en cualquier rama,

pero

de mismo,

árbol.

a

Significados

 

La realidad y los sueños se extienden como fondo de significados.

Un decorado.

Significado que es belleza

y también, prisión.

Solo basta cambiar el significado.

para volar o caer.

Nadie esta dormido por soñar.

Sino por no poder elegir.

Significación.

La musa nocturna se agazapa como gata,

luego salta desplegándose infinita.

Lo mismo hace la del día.

No son diferentes.

Solo cambia un fondo.

Mal ritmo, el que conduce cuesta abajo.

El significado de los unos, se lanza contra el de otros.

Cada cual por eso se agrupa.

Prisión y libertad, no están en el decorado, sino en como

y porque

de cada andar.

a